EL INSTITUTO DE PEDAGOGÍA CRÍTICA, UNA RESEÑA HISTÓRICA
El Instituto de Pedagogía Crítica nace como un proyecto pedagógico alternativo a perspectivas hegemónicas, que legitimaban el pensamiento único, neoliberal, encarnado en una sociedad permeada por las desigualdades sociales. El proyecto encuentra sus raíces en la perspectiva de la pedagogía crítica Latinoamericana, sobre todo en el pensamiento de Paulo Freire, que visualiza a la pedagogía como una forma de vida, centrada en leer el mundo de forma crítica para actuar en su transformación en pro de la justicia y la dignidad social.
Partiendo de la visión de la educación como un acto político, que se puede desarrollar como un proceso alienante, de invasión cultural y domesticación o bien, los involucrados en el acto educativo se educan críticamente en colectivo, para enfrentar y transformar su realidad de forma liberadora. Los miembros fundadores del IPEC nos identificamos con el ideal de la educación liberadora como una posibilidad para enfrentar las problemáticas educativas de los grupos más favorecidos, así como coadyuvar, a través de la investigación y la formación profesional, a su mejoramiento y transformación.
Bajo estos ideales, confluyó un grupo de académicos de diversas partes del país y mundo, cuyas reflexiones tuvieron como código común de comunicación las pedagogías críticas; pues convergieron aportaciones de la pedagogía crítica latinoamericana, norteamericana y la sociología crítica; proponen de manera colectiva la construcción de un proyecto pedagógico que profesionalice a los educadores de los diversos niveles educativos y forme investigadores con posicionamientos alternativos a la oficialidad, que puedan incidir en la realidad de los más vulnerables social, culturalmente y en cuestión de género. Con tal propósito se funda la institución educativa de Instituto de Pedagogía Crítica, que, por carecer de recursos para operarse, se registra como institución de Educación Superior con carácter privado, pero sin fines de lucro.
En el 2009, después de una serie de trámites administrativos se otorga el Registro de Validez Oficial al primer programa de posgrado del IPEC, y la clave de centro de trabajo. Esto bajo la incorporación a la Secretaría de Educación y Cultura del Estado de Chihuahua. El primer programa fue de maestría en modalidad presencial, cuyo reconocimiento facilitó las condiciones institucionales para acrecentar la oferta educativa a la modalidad mixta y a ofrecer programas de doctorado.
El IPEC como institución educativa cuya mayor población estudiantil son los maestros de educación básica, ha sufrido transformaciones a partir de las políticas nacionales. Se ha transformado la demanda hacia sus programas, sobre todo en lo referente a la modalidad. Ha decrecido la demanda por programas presenciales y se ha acrecentado por la modalidad mixta. Esto ha repercutido en una transformación profunda de los servicios de la institución y en la búsqueda de estrategias para fortalecer los programas que se ofertan.
Los cambios en las condiciones institucionales han generado el fortalecimiento de otras funciones como es la producción investigativa y la formación de investigadores, misma que se refleja directamente en la elevación de los índices de eficiencia terminal y en el impacto de los investigadores nóveles en diversos espacios académicos y de gestión institucional, tales como el acceso a plazas de universidades e instituciones de educación superior, así como plazas directivas.
El crecimiento en la producción investigativa, así como la generación de espacios para difundir los productos de investigación ha transformado favorablemente al IPEC, pues ha coadyuvado a incrementar su planta docente con catedráticos de diferentes partes del mundo, que se encuentran con el pensamiento crítico. También ha permitido establecer relaciones con redes e instancias académicas y de investigación que enriquecen con sus aportaciones a la mirada de los integrantes del IPEC.
Actualmente nuestra institución desarrolla todas las actividades sustantivas de una Institución de Educación Superior, que ha mantenido su demanda con respecto al programa, pero ha ampliado su oferta a cursos, diplomados, seminarios y talleres a diversas instancias educativas y de la sociedad civil, buscando incidir en la construcción de una educación más humanista y un mundo más justo, a partir de un acto educativo liberador.
El Instituto de Pedagogía Crítica es una institución con registro oficial ante la Secretaría de Educación Pública en México a través de la Secretaría de Educación y Cultura del estado de Chihuahua, que tiene como propósito central generar y difundir el pensamiento crítico, así como formar investigadores comprometidos con la transformación social.
La pedagogía Crítica recoge las propuestas más avanzadas en el campo de la sociología marxista, los estudios de género, el multiculturalismo, la teología de la liberación, la filosofía posmoderna, el pensamiento complejo, las pedagogías libertarias, la psicología profunda, los movimientos ecologistas, la educación popular y el altermundismo.
Misión
Ante la complejidad del nuevo milenio, el Instituto de Pedagogía crítica busca incursionar de forma original en los nuevos campos emergentes del conocimiento, utilizando a la investigación como una herramienta científica para comprender y transformar la realidad.
Visión
Una institución con reconocimiento internacional en la producción de conocimiento original y en la excelencia de sus programas educativos, basados en el trabajo dialógico, incluyente y crítico.
Valores
Ideario
Comunicación horizontal: Se establecen relaciones con estudiantes, académicos, personal administrativo y directivo de forma bidireccional, considerando los diversos puntos de vista.
Empatía: En una sociedad atravesada por discursos que promueven el individualismo y la competencia, consideramos fundamental el desarrollo de la capacidad de reconocer y compartir los pensamientos, sentimientos y emociones de todo ser humano.
Respeto a la diversidad: Las diferencias son fuente de enriquecimiento para nuestra comunidad educativa, por ello nos pronunciamos firmemente por la valoración, el respeto y la aceptación de las identidades diversas a la vez que rechazamos cualquier manifestación de discriminación por motivo de edad, raza, religión, condición social, física u orientación sexual.
Responsabilidad académica: Para el IPEC es imprescindible la honestidad intelectual tanto en el desarrollo de las actividades docentes, como en el desempeño del estudiantado, por ello se demanda congruencia con los principios institucionales a todos los integrantes de nuestra comunidad educativa.
Compromiso social: El IPEC sostiene una postura política en favor de los grupos sociales menos favorecidos, por ello sus programas educativos están vertebrados sobre la pedagogía crítica, procuramos una práctica pedagógica que genere resistencias a las formas unilaterales y verticalistas de ejercer el poder y aportar argumentos teóricos que permitan visibilizar la educación como un espacio político develando las violencias simbólicas.